La Segunda Guerra Mundial proporcionó un contexto épico para actos tremendamente heroicos que continúan conmoviendo después de más de medio siglo, así que no sorprende que sus eventos proporcionen una chispa inagotable para la imaginación de escritores alrededor del mundo. De esa fuente Laurent Vachaud cosechó el material para su novela Espías en la Sombra, que se inspiró parcialmente en hechos de la vida real, enfocándose en las duras vidas de las mujeres que aportaron lágrimas y sangre a la lucha contra la opresión Nazi.
El relato lo protagoniza Louise Desfontaines, integrante de la resistencia francesa quien tras una misión fallida que le cuesta la vida a su esposo se ve forzada a huir a Inglaterra en donde se une al Special Operations Executive de Winston Churchill. Ahí es reclutada por su hermano Pierre—con quien tiene una relación disfuncional—para una misión crítica: Extraer de Francia a un geólogo inglés antes de que los alemanes lo capturen y le arranquen el secreto de la invasión de Normandía.
Pierre ha formado un equipo de agentes femeninas, seleccionadas para aportar algún talento imprescindible a la inusual operación. Conocemos a Suzy, una bailarina exótica con un pasado vergonzoso, a Gaëlle, una especialista en explosivos, a Jeanne, una prostituta cínica, y a María, una operadora de radio judía. Pero lo que parecía una infiltración fríamente calculada rápidamente degenera en un desastre, y nuestras protagonistas se ven a la merced de la implacable persecución de Karl Hendrick, un coronel de la Gestapo cuya fijación con develar la ofensiva aliada es tan fuerte como su obsesión con Suzy.